Mitos sobre la colocación sobre piso existente.

La colocación de un nuevo piso sobre otro existente es una práctica cada vez más usual. Es lógico, sacar cerámicos para poner nuevos es un problema que genera ruido, polvo, tiempo y dinero ¿por qué no colocar encima del existente si es posible? Con esta nueva y práctica modalidad aparecieron varios mitos que vamos a describir y que... no funcionan.

Mito nro. 1: "Limpiar" el piso con ácido muriático para que "quede poroso". Acá ya se empieza mal desde lo conceptual. La porosidad implica que haya en un cuerpo aire como sucede en una esponja o en la base cerámica del piso. El ácido ¡no logra porosidad! ni tampoco "quema" el esmalte para dar mejor adherencia. Una pavada.-
Mito nro. 2: Picar los cerámicos para "tener mejor agarre". Si se hace eso el mejor agarre estará solamente sobre la superficie picada. Habría que picar tooooodo el esmalte para que efectivamente haya buena adherencia y eso equivale directamente a sacarlos.-
Mito nro. 3: Rayar los cerámicos con una amoladora para, otra vez, "tener mejor agarre". Otra variante del anterior pero que hace más polvo todavía. El colocador pasa el disco en varias direcciones y una nube lo tapa. El cerámico solo se agarra en las rayas. Otra tontería.-
Vean las fotos y verifiquen que con mucho esfuerzo se preocuparon en "puntear" todo el piso con una mecha. Claro que el cerámico se despegó igual. Pero dejó muy lindas marquitas redondas.-
La única alternativa razonable es utilizar mezcla adhesiva que contenga polímeros que aumenten su adherencia considerablemente. Son las que dicen en sus empaque "Piso sobre piso" o "Colocación sobre base sin absorción". Nada puede hacer que un esmalte que es como vidrio se vuelva absorbente para que haya anclaje (fig. 1). Todo lo demás es verso y siempre lo mejor es colocar sobre carpeta.-