- 1) Creer que los cerámicos son iguales en dimensión: las distintas empresas usan distintos moldes para la fabricación. La dimensión indicada (por ejemplo 40x40) es una medida NOMINAL, es decir que pueden ser 39,8 o 40,3cm. Los moldes no son perfectos y el horno modifica las dimensiones. Cuando buscás una medida nominal podés encontrarla y, sin embargo ser distintas. Y si son de distinta marca... peor.-
- 2) Creer que los cerámicos "encajan" perfectamente: comprás un cerámico y al tiempo necesitás algunos porque el plomero rompió la pared. Vas a comprar y ¡hay en stock! Lo querés poner y no entra o es muy chico. Es lógico... cambió la partida y las dimensiones variaron. Error. Los cerámicos nunca encajan.-
- 3) Creer que van a ser igualitos. El mismo caso anterior. Conseguís la misma marca y modelo. Lo sacás de la caja y... no es igual. Error. El de la pared está usado, limpiado, ensuciado y vuelto a limpiar. El de la caja está limpio y virgen. Y si son partidas distintas... peor.-
- 4) Creer que siempre es posible encontrar un modelo: Compraste un cerámico para la cocina y a los dos años querés ampliar el comedor. Vas a comprar el mismo cerámico pero no lo encontrar. Y si... es así. Los modelos pueden varias, ser discontinuados, dejarse de fabricar o de importar. Uno siempre piensa que hay para siempre. Pero no. Otro error muy común.-
- 5) Creer que "siempre hay". Vas a buscar el modelo que compraste hace una semana nomás. Y ¡no ha más! No es que ya no va a haber pero hoy... no hay. Va a volver a entrar en una semana o en dos o en diez. Los stocks se agotan y la reposición no es inmediata. Calculá bien tu compra para no encontrarte con sorpresas.
- 6) Creer que hay muchas medidas de un mismo modelo. Te gusta ese color y ese brillo. Pero ¿no hay más chicos? ¿o más grandes? No. Por lo general hay una sola dimensión por modelo o tipo. Es ese y solo ese.-
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